La adquisición de Breguet primero por los hermanos Chaumet y luego por la compañía financiera Investcorp proporciona a la Manufactura relojera un nuevo impulso durante un periodo favorable a la evolución. Breguet ya no puede dar respuesta a la creciente demanda de los mercados tradicionales o los emergentes como Asia, por lo que decide invertir en nuevas instalaciones, también en Vallée de Joux, como muestra de su confianza en el futuro.
A la línea Marine se incorpora un cronógrafo con el movimiento automático más pequeño del mundo.